domingo, 26 de octubre de 2008

FELIZ CUMPLEAÑOS RODRIGO

Acontinuación, dos entradas sobre la vida y milagros del Peke y una encuesta guay.

EL 27 DE OCTUBRE DE 1989

Cuando yo era una colegiala y, como tal, estaba en el colegio, me avisaron por el altavoz y me dijeron lo siguiente: "María Ferrer, has tenido un hermano." Yo tenía 11 años cumplidos en agosto, era viernes por la tarde y estábamos en clase de matemáticas, con Olvido.

Al día siguiente, mi abuela me llevó al hospital a conocer a mi hermano., que como todos sabréis a estas alturas, se llamaría Rodrigo. Recuerdo... ¡lo feo que era! Todo arrugado, llorando, con las orejas a medio hacer (las tenía dobladas por arriba y por abajo cual rollito de primavera...) sin cejas ni pestañas, y esos pies... morados con puntitos blancos...
Bueno, según pasaron los días fue enguapando, y ya se le podía mirar...
Desde el primer día que pasó en casa yo colaboré en su cuidado.
No me dejaban bañarle, pero le secaba y le vestía,



Cuando volvía del colegio, como hacía frío y tenía las manos heladas, las metía bajo el grifo en agua caliente y a continuación me pedía darle el biberón.

También le cambiaba los pañales, y los fines de semana me lo llevaba a mi cama si se despertaba pronto (que lo hacía) o le procuraba los cuidados que necesitara en aquel momento.



Era mi bebé, el juguete de la casa. Era como una bolita blanda... ¡Cómo molaba!



Sin embargo, el día de su bautizo no fui capaz de ponerme en primera plana. No como otros.... (abajo, esquina derecha).
Algunos aprovecharon el hecho de que su padre fuera el padrino...



Los documentos gráficos que vienen a continuación son excepcionales. Por eso he decidido ponerlos.


Puesto que ésto que véis...



Es decir, a Rodrigo durmiendo...



Era una cosa que para nuestra desgracia,



¡¡¡No sucedía tan a menudo como hubiéramos querido!!! (Sobre todo por la noche)

Además, siempre se ponía a llorar cuando empezaba Oliver y Benji, nunca fallaba, oye.

Con el paso del tiempo empezó a tener una extraña fijación por los gatos. Hasta el punto de que, cuando aprendió a hablar -y mucho tiempo después- comenzó a decir que era un gato y solía actuar como tal.



Aunque, claro, hubo otra época en que decía que era rumano... y lo de la inmigración de aquella no se veía por aquí... nunca lo entenderé.
El caso es que desde pequeño empezó a mostrar intérés por las nuevas tecnologías del momento.



A imitar a los mayores...


Y a intentar entender lo que para él era inexplicable, a base de tesón y horas de dedicación.



Era un culo-inquieto que exploraba todos los rincones; aunque su favorito era éste. Aquí solíamos encontrarlo cuando desaparecía un rato.



Abajo a la derecha podéis ver mi estupenda y querida cama de la Barbie. Bien, un culo con pañal sin escrúpulos acabó con ella cuando se plantó encima en una de éstas.
Y fue pasando el tiempo, y Rodrigo fue creciendo, y con él su pesadilla también creció: SU PELO.



Al principio nada nos daba a entender en que se acabaría convirtiendo, pues en la familia todos lo habíamos tenido así; incluso yo, aunque cuando crecí se me alisó (qué paradoja).



Nosotros nos alegramos porque, por fin, podríamos taparle las orejas...
De todas formas yo no me podía contener y, en alguna ocasión jugué a las peluqueras...



Creo que él no estaba muy conforme con este juego...
Pero a medida que crecía, su pelo se iba descontrolando, tomando cuerpo... y vida propia.



A continuación, pasemos por algunas etapas de su vida, en las cuales yo consideraba que su pelo recordaba al casco de Darth Vader...



Con todo, aún podía salir a la calle sin gorro o con el pelo "suelto".



Aquí en nene con el papa tó contento camino de Monforte.
Un día, de repente, mi hermanito pequeño se despertó siendo más alto que yo. Pero la cara mofletuda era la misma...



Tengo pocas fotos actuales porque se niega a dármelas, aquí pongo dos:



Ya conocéis a María de otra entrada del blog. Aquí era más pequeñita. A Rodrigo le hace mucha gracia, aunque le da miedo cogerla. Yo creo que se entienden bien porque son compañeros de "rollizos y molletes", y ambos han sufrido las mofletadas de la gente (sobre todo las mías...) o los comentarios de... "ay, qué gordito..." o, "no se muere de hambre, ¿eh?". Como ya he dicho, a María la llamo "Cara-pan", a Rodrigo le llamaba ( y le llamo) "Cara-gorda".

Aprovecho para contar una anécdota de cuando mi abuela, llevó a Rodrigo de chiquitín a la pediatra, con todos sus molfletes y rollizos, y va y le pregunta a la médica: "¿no cree usted que debería estar más gordito?, a lo que la mujer respondió: "señora, usted qué quiere ¿un nieto o un gochín?" Esto es verídico.



A Rodrigo le ha costado muuuucho hacerse amigo de Raquel. Ya que, como he dicho también, comencé a cuidarla cuando tenía 11 meses y, desde entonces hasta hace poco, cada vez que le veía era ponerse a llorar como si estuviera viendo al diablo. Ahora, sé de primera mano (quizá porque ya sabe hablar y pudo decírmelo) que le asustaba porque era alto. De hecho, digamos que ya le tolera, pero no pierde el sueño si no le ve.

Hoy es el cumpleaños de mi hermano y por eso he querido dedicarle este blog.

Como ya he dicho, no tengo mucho tiempo y tampoco tengo escáner; por eso las fotos están cogidas a la que te jod...

Pero bueno, yo creo que he sabido transmitir lo que realmente quería, felicitar a mi hermano y hacerlo preotagonista de mi blog.

ALGUNOS ASPECTOS RESEÑABLES EN LA VIDA DE RODRIGO

En primer lugar, cabe señalar este maravilloso invento en el que trasnportábamos al enano por toda la casa. En ocasiones, después de dar bien por saco y tras haberse soltado, comido y tirado por ahí las almohadillas de los lados (sujetas con velcro) se quedaba dormido. Pero como ya he dicho, no era frecuente. Aunque he de decir que, cuado así opcurría, intentábamos no respirar si quiera para que "la paz" durara un poco más.



Rodrigo siempre destacó por su inmenso par de mofletes. Si esta foto se viera bien, os aseguro que os costaría encontrarle la boca, ya que se hallaba tras éstos. Su tío y padrino, Juan, llegó a decir que, en unos años, cuando aprendiera a contar, en vez de decir 3, tendría que decir 1,1,1.



Este era el "coe-coe" (corre-corre) su juguete favorito, con el que jugó hasta que lo destrozó completamente. La cabeza del caracol pitaba. !Cómo corría allá donde tuviera espacio con el invento éste!

También destacan entre sus juguetes favoritos, aunque aquí no están, el "coche pulila" y "el nganón de la buginga" (coche de policía y camión de la basura), ahora depositados en un trastero del patio de abuelita.

Tengo que decir, que a estas alturas de la foto el nene ya sabía distinguir las marcas de cada coche que veía, e iba sentado en su sillita diciéndonos los números de los portales por donde pasábamos. ¡Iker, ahí queda eso!.



Cuando el "culo-inquieto" creció, empezó a hacer honor a su nombre. En cada una de las funciones del cole en las que participó no paró quieto un instante, rascándose todo lo que le picaba y moviéndose como si tuviera el baile de San Vito.



Esta fue la primera vez que pisó el mar. Lógicamente, se mojó las posaderas.



Volviendo al hecho de no parar quieto. ¿Véis la foto siguiente? Pues el "angelito" adquirió justo esta postura que todos estáis viendo el día que le tocó hacer de monaguillo en la iglesia de La Anunciata. Sólo que, en vez de ser el sofá de casa...sí, era EL ALTAR.

¡Qué vergüenza! La gente nos paraba por la calle para reprocharnos su actitud y nosotros, que no vamos a misa por decreto ley, no nos habíamos enterado de nada... en fin. Yo me reí mucho, y lo sigo haciendo, qué leches. Como dice mi madre, que las monjas le hubieran enseñado modales en la iglesia, que para eso están. Y mis amigas de aquella... fueron ellas quienes le dieron catequesis (valiente pérdida de tiempo) ¿qué le enseñaron? El mejor fue el cura, que según Rodrigo, le dijo riéndose que " eso no era la barra de un bar". ¡Con Rodrigo se ha topao la Iglesia!



Y hablando de eso... pasamos a las fotos de la Comunión. Como veis, a Rodri le mola la tarta...



Pero no es el único... Uy, ¿y esta foto...?



No podemos despedir el blog sin hablar de nuestra prima Carlota... es posible que ella ahora se muera de vergüenza, pero nosotros nos lo tomamos con filosofía, pues al fin y al cabo, todos hemos sido pequeños y plastas.

El caso es que Carlota vivió los primeros años de su infancia enamorada de Rodrigo. La cosa era así: "Ay Rodrigo... qué guapo eres..." y casamientos por aquí, y noviazgos por allá, y embelesamiento en la mesa mientras comemos... en fin. Pero eso ya pasó.

En la foto siguiente podréis apreciar lo emocionada que estaba Carlota del brazo de Rodrigo, cual foto nupcial.

El coquito de al lado es Amanda, nuestra otra prima y hermana de Carlota, que por cierto, son hijas de la tía y madrina de Rodrigo, Eva.



Y quiero finalizar el tema con una foto familiar de ese mismo día:



Por último, decir que el nene ha seguido mis pasos, ha comenzado a estudiar Historia (ya está en 2º año) y tiene prácticamente las mismas inquietudes que yo:



¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ FELICIDADES CARA-GORDAAAAA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!



domingo, 5 de octubre de 2008

¿Y CÓMO VA EL REGALO DERAQUEL?

En vista de que mi reducido "club de fans" me viene pidiendo "guerra", he decidido actualizar y comentar un poco cómo va el tema del baúl.


Pues... va.

Como véis ya está forrado. No fue difícil, pensé que me iba a quedar peor. No obstante, como se notaban las imperfecciones de las esquinas, opté por añadir un trenzado que, como no sé si se aprecia en la foto anterior, pongo más de cerca en ésta.

Tengo que recordaros que, hasta hace un par de días, no sabía por dónde se cogían las tijeras. Por eso deberíais mirar mi "obra" con un poquito de condescendencia.




Después de forrarlo, le dí una mano de pintura con témpera. Aunque antes de empezar a dibujar, tengo que darle otra.




Ya tengo escogido el dibujo de la tapa. Pero es un secreto, que será revelado en la próxima actualización relacionada con el baúl que, por cierto, no sé cuando será porque el próximo fin de semana lo tengo ocupado con mis dos amores: Guillermo y Anakin Skywalker.
Una pista: va a ser un tema relacionado con el mundo de la magia. Algo eternamente bonito, pero no demasiado infantil porque, como ya dije, quiero que este joyero dure lo que no está en los escritos
Bueno, pues ésto es todo por hoy. Quedan pendientes unos cuantos temas que iré haciendo poco a poco. No debéis olvidar que, a parte del curro, estoy preparando unas oposiciones que me traen un poco por la calle de la amargura. Así que no puedo escribir a menudo.
Los temas pendientes son: el acto de coronación de Alfonso VII emperador, al que iré esta tarde y os mantendré informados, os guste o no; que ésto son cosas que hay que saber. También os voy a narrar un detallado capítulo sobre lo que yo llamo "mis días de gloria", cuando hacía ballet y salía a actuar en el escenario. Y el tema estrella: voy a explicar el por qué del nombre de mi blog. O no... ya veremos. Es un secreto celosamente guardado que, aunque todos creáis que lo sabéis, sólo conocéis lo que yo he querido desvelar.
Y con ésto, me despido, que tengo mucho trabajo hoy. Sed buenos, y no hagáis nada que yo no haría (como le dijo el Hada Madrina a Cenicienta).